#17 *AGRACIADO/GRACEFUL*

*Hacha Leprechaun*

Zha’kor llegó escoltado por un escuadrón entero de paladines a la forja invisible, que es como se conoce a la tan conocida fragua de los duendes herreros, aquellos que proveen de material mágico a cada ser feérico en el mundo.

Pues bien, una vez allí primero debías encontrarte con uno ellos y que accedieran a conducirte a sus instalaciones, que se encontraban ocultas a simple vista. Tras eso se debe pasar una prueba de honradez y benevolencia para ser aceptados, y sólo entonces se plantearán si mereces ser tratado como uno más o ser expulsado. Pero nosotros hablamos del herrero cuyo renombre ya había alcanzado los siete rincones del planeta, no sería extraño que en su caso se saltasen todos los procedimientos coloquiales para llevarlo directamente a la forjas invisible. De hecho, Viajero, así es como sucedió.

La forja feérica dotaba con glifos y runas los hechizos pertinentes que daban capacidades extraordinarias a sus creaciones, pero Zha’kor no era un ser mágico, y reproducir esas runas de nada le serviría. Para llamar a la inspiración pasó unos días con los seres que en aquella región habitaban y conoció de todo, sin embargo hubo una criatura específica que le llamó poderosamente la atención, el leprechaun.

Como herrero profesional, la capacidad de generar un metal a voluntad ya era algo extraordinario para él, pero además ese oro poseía propiedades inigualables relacionadas con la suerte y de pronto, mientras compartía cerveza artesana con uno ellos se decidió a crear lo que hoy conocemos como el Hacha Leprechaun.

Sí, no me mires así, el hacha forjada totalmente con oro macizo y que dota de la gracia de los feéricos a su portador existe, pero te diré algo más, con ésta arma en tus manos la suerte estará de tu lado y difícilmente fallarás un golpe, pero aún más difícil será que no logres bloquear o esquivar uno dirigido hacia ti. 

Se cuenta que su último portador no la usó nunca en combate,  se contentaba con llevarla atada a la espalda para disfrutar de su gracia y su poder innato, y aun así sobrevivió a las más cruentas batallas.

Toda una maravilla, por la que los feéricos lo consideraron uno más entre ellos, e incluso le ofrecieron vivir allí como uno más, pero Zha’kor no había cumplido aún su meta de vida. Aún debía visitar otras forjas, y su camino debía proseguir, así que tras la creación del hacha leprechaun se marchó de aquella región mágica para ir directo al lugar más peligroso del planeta.

Mauricio Folk